Afinando

Sería mucho más fácil si pudiéramos prescindir del paciente a medida que exploramos el reino de la psicopatología; sería mucho más simple si pudiéramos limitarnos a examinar la química y la fisiología de su cerebro, y tratar los eventos mentales como objetos ajenos a nuestra experiencia inmediata, o como meras variables de fórmulas estadísticas impersonales. Pero si bien estos abordajes son muy importantes para entender el ser comportamiento humano, no pueden por sí solos explicar o descubrir todos los hechos relevantes. Para saber qué ocurre en la mente del otro, debemos conservar la imagen visual de sus asociaciones y sentimientos; debemos ser nosotros mismos el instrumento que interpreta la melodía del paciente

(John Nemiah)