Many Times (1999)

Many Times (1999) Juan Muñoz

«La obra permanece ahí, separada de ti, como en un mundo propio. Creo que en las obras de arte más logradas, las piezas existen sin ti. Siempre he tenido la sensación de que una pieza debe funcionar incluso cuando no haya nadie. Si piensas en las grandes piezas de los grandes museos, emanan constantemente una energía increible, una energia visual, haya alguien delante o no. Me gustaria introducir un murmullo en una de mis esculturas, que se active solo por la noche, cuando se hubiera ido todo el mundo. Tenerlo funcionando toda la noche y que en el momento de abrir la puerta la pieza dejara de murmurar»

Juan Muñoz

Afinando

Sería mucho más fácil si pudiéramos prescindir del paciente a medida que exploramos el reino de la psicopatología; sería mucho más simple si pudiéramos limitarnos a examinar la química y la fisiología de su cerebro, y tratar los eventos mentales como objetos ajenos a nuestra experiencia inmediata, o como meras variables de fórmulas estadísticas impersonales. Pero si bien estos abordajes son muy importantes para entender el ser comportamiento humano, no pueden por sí solos explicar o descubrir todos los hechos relevantes. Para saber qué ocurre en la mente del otro, debemos conservar la imagen visual de sus asociaciones y sentimientos; debemos ser nosotros mismos el instrumento que interpreta la melodía del paciente

(John Nemiah)

La normalidad

La persona verdaderamente “sana” no es simplemente la que se declara como tal, ni mucho menos un enfermo que se ignora, sino un sujeto que conserva en si tantas fijaciones conflictuales como la mayoría de la gente, que no haya encontrado en su camino dificultades internas o externas que superen su equipo afectivo hereditario o adquirido, sus facultades personales de defensa o adaptación, y que se permita un juego bastante flexible de sus necesidades pulsionales, de sus proceso primario y secundario tanto en los planos personales como sociales, evaluando la necesidad de comportarse de manera aparentemente “aberrante” en circunstancias excepcionalmente “anormales”.”

(J. Bergeret)